Una y otra vez la lluvia caerá
Como lágrimas de una estrella
Como lágrimas de una estrella
Una y otra vez la lluvia dirá
Cuán frágiles somos
Cuán frágiles somos.Fragile.-Sting
Es un placer hablar de los buenos resultados que he obtenido recientemente, estoy muy emocionado con el crecimiento del blog (600 lectores y más de 1500 visitas mensuales), estoy mejorando mi condición física y mi salud, y otras cosas más que me hacen muy feliz, en agradecimiento me gustaría hablar de una de las claves fundamentales que me ha ayudado; y que cada vez noto que está dejando de ser un principio común en la sociedad.
Como todos saben, realizar un cambio significativo en la vida es difícil, a veces porque no tenemos tiempo, energías o motivación. Otras veces tenemos todo a la mano pero necesitamos un empujoncito o un balde de agua fría para comenzar a avanzar.
Sé que eso es cierto porque así estaba a finales de 2011, tenía muchas deudas, pesaba 25 libras más, además de mi habitación repleta contaba con tres habitaciones que servían de bodegas con quien sabe qué, estaba en tratamiento médico permanente y no sentía ninguna mejora. Lo peor de todo es que sabía que estaba en problemas y en vez de buscar soluciones me hundía mas en mis malos hábitos.
De pronto algo cambio.
Si, sabía que tenía que cambiar, esa no era la vida que yo quería vivir. De repente me interese en leer algunos libros de autoayuda para motivarme, ese fue el fosforo para que Troya empezara a arder. Lo siguiente que recuerdo fue que empecé a soñar con alcanzar metas personales que antes no hubiera siquiera mencionado a otra persona. Iba despacio, muy muy despacio, comencé a realizar cambios graduales.
Comencé a ser una persona más ordenada, convertí una de las habitaciones (bodega) en un estudio de grabación y con la ayuda de algunos amigos termine de grabar mi CD Esencia.
Luego apareció el minimalismo, llego con el libro “El Arte de Ser Minimalista”, fue un gancho al hígado, entonces descubrí que mis posesiones estaban anclándome, ”casualmente” estaba por mudarme a una casa más pequeña; así que varias cajas de papeles ardieron, mucha ropa fue donada y algunas cosas se las llevo el camión de la basura.
Reduje mis posesiones en un 40%.
Llego el turno de mi salud, al no preocuparme por trabajar más porque ya no quería más, reduje mis horas de trabajo e hice tiempo para comenzar a correr, un habito que siempre he disfrutado, cambie mis hábitos alimenticios durante 3 meses y perdí 25 libras. Al fin me cure.
Sin lugar a dudas mi espiritualidad mejoro en cada paso que dí; y eso personalmente es lo que más valoro.
Haber hecho cambios graduales me ayudado muchísimo a ser mejor esposo, hijo, hermano y amigo. Me ha convertido en mejor cristiano, ahora puedo decir que soy Músico y Escritor, cosa que antes jamás creí que llegara a decir eso de mí.
Los seres humanos somos frágiles como muy bien lo dice Sting en la canción citada arriba. por ello necesitamos cambios pequeños para no rompernos o debilitarnos en el proceso.
No lo he hecho porque quiero ser reconocido, tampoco por dinero, los cambios que he hecho es porque la vida que tengo ahora es la vida que yo quiero vivir y los cambios graduales han sido parte fundamental del éxito obtenido.
Si te gusto la entrada compártela. Quizás inspire a alguien que necesite un pequeño cambio.
Feliz Dia 🙂