Existen muchas leyendas acerca de cómo los colonizadores obtenían el oro de los lugares que sometían, me causa bastante gracia una de ellas que voy a contarte a continuación.

Se dice que muchos de los indígenas quedaron impresionados cuando los colonizadores les mostraban espejos de cristal, así que voluntariamente muchos indígenas entregaban oro puro a cambio de un pedazo de cristal.

Ahora pasa algo bastante parecido, sobre todo cuando sale un nuevo modelo de smartphone, tablet o algún nuevo dispositivo electrónico. Algunos están dispuestos a sacrificar los ahorros de meses con tal de obtener el “nuevo modelo”, cuando un par de meses después sale la siguiente actualización o la competencia saca uno con más lucecitas, el “nuevo modelo” pasa a ser un modelo desfasado.

Por supuesto que me fascina la tecnología como a cualquier otro, pero tengo un dispositivo que funciona bien, que corre las aplicaciones que necesito, toma fotos, hace video llamadas, pero por que no es caro, no es de vanguardia, cuando se dañe conseguiré otro que se adecue a mis necesidades y que no me cueste un riñón, y no necesariamente tiene que ser el más “nuevo” en el mercado.

Pero no siempre he tenido el mismo punto de vista, durante muchos años cambiaba el móvil cada cuatro o cinco meses con tal de tener el nuevo modelo, vendía el anterior y compraba el nuevo y en dicha transacción siempre perdía dinero, el modelo anterior aunque solo tuviese un par de meses de uso, estuviera en perfectas condiciones había perdido casi la mitad de su valor solo por el hecho de ya no ser el nuevo, y a pesar de que en ocasiones los nuevos modelos trajeran algunas desventajas en comparación con el anterior.

No te dejes engañar con un pedazo de cristal, no es más que eso con un par de circuitos y mucha radiación.

Feliz Día 🙂

Foto: Matthew Hurst